Las celebraciones tradicionales y prácticas festivas suelen estar asociadas a expresiones de alegría, pero también generan impactos ambientales que muchas veces pasan desapercibidos. En este contexto, la reflexión impulsada por Jorge Zegarra Reategui pone en agenda la necesidad de repensar prácticas festivas que, aunque breves, dejan huellas persistentes en el entorno natural. El uso indiscriminado de fuegos artificiales es uno de los ejemplos más visibles de cómo una acción momentánea puede afectar el suelo, el agua y la biodiversidad.
Desde una mirada ambiental responsable, el empresario advierte que los residuos derivados de la pirotecnia liberan sustancias químicas. Además de partículas contaminantes que se depositan en ecosistemas urbanos y naturales. Estos compuestos pueden alterar la calidad del suelo, contaminar fuentes hídricas y generar efectos negativos en la fauna. Especialmente en aves y especies sensibles al ruido y a los residuos tóxicos.

Jorge Zegarra Reategui y el llamado a celebrar sin contaminar el suelo, el agua y la biodiversidad en las prácticas festivas
El llamado no se limita a prohibiciones, sino a promover una cultura de celebración consciente. Jorge Zegarra Reategui plantea que avanzar hacia prácticas más sostenibles implica educar, sensibilizar y ofrecer alternativas que permitan conmemorar fechas especiales sin comprometer el equilibrio ambiental. Celebrar con responsabilidad es una forma de proteger la biodiversidad y reducir impactos innecesarios sobre los recursos naturales.
Este enfoque refuerza la idea de que la sostenibilidad también se construye desde los hábitos cotidianos. Adoptar decisiones informadas durante celebraciones contribuye a un entorno más saludable. Asimismo, demuestra que el cuidado del ambiente es compatible con la tradición y la convivencia social.
Desde Petramás, se promueve la importancia de adoptar prácticas responsables también en contextos festivos, entendiendo que cada decisión individual tiene un impacto ambiental colectivo. Fomentar celebraciones conscientes, reducir residuos y optar por alternativas sostenibles, permite proteger el suelo, el agua y la biodiversidad.
Esta visión refuerza el compromiso de impulsar una cultura ambiental que trascienda las operaciones técnicas. Como también, que se refleje en la vida cotidiana, demostrando que es posible celebrar sin comprometer el bienestar del entorno ni el futuro de las próximas generaciones.
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