Según especialistas, la industria especializada en la producción del azúcar trae consigo problemas contaminantes desde su producción.
El azúcar tiene una historia milenaria que se remonta a la India y el sudeste asiático, el cual implicaba costos excesivos para su adquisición. Sin embargo, desde el siglo XIX, el azúcar dejó de ser un lujo exclusivo de la élite y pasó a ser un ingrediente esencial en la alimentación global, impulsado por la industrialización y el refinamiento de la producción.
En la actualidad, la industria del azúcar alrededor del mundo es una de las más poderosas a nivel mundial, con una producción anual de más de 180 millones de toneladas. Su popularidad ha crecido exponencialmente debido a su versatilidad en la industria alimentaria, donde se usa en bebidas, postres, productos procesados y panadería.
La industria azucarera es una de las más influyentes en el comercio global, con una producción de más de 180 millones de toneladas anuales. Países como Brasil, India y Tailandia dominan el mercado, exportando grandes volúmenes de azúcar a nivel mundial.
Contaminantes del azúcar
Sin embargo, la producción de azúcar, ya sea de caña o de remolacha, tiene un impacto ambiental significativo debido a la gran cantidad de recursos que requiere, los desechos que genera y los contaminantes asociados. Uno de los problemas más graves es el alto consumo de agua, especialmente en el cultivo de caña de azúcar.
Se estima que para producir un solo kilogramo de azúcar se necesitan entre 1,500 y 3,000 litros de agua. Esto agrava la crisis hídrica en regiones donde el agua ya es un recurso escaso, considerando la escasez de agua que se vive en distintas partes del mundo.
Otro impacto importante es la deforestación y pérdida de biodiversidad. Para expandir los cultivos de caña de azúcar, especialmente en países tropicales como Brasil, Perú, Indonesia y Tailandia, se han destruido vastas áreas de bosques, incluyendo ecosistemas clave como el Amazonas.
Asimismo, el uso excesivo de fertilizantes y pesticidas en la producción de azúcar ha contribuido a la contaminación del suelo y del agua. Esto, sin considerar el proceso de refinamiento del azúcar que también genera altas emisiones de gases de efecto invernadero, debido al uso de combustibles fósiles en las fábricas y al metano liberado por los residuos de la caña.
¿Cómo el enfoque empresarial de Jorge Zegarra Reategui ayuda al medio ambiente?
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